El paso de los años y el envejecimiento que conlleva son los principales factores culpables de que vayamos perdiendo melanina en el cabello, algo que traducimos como la aparición de las primeras canas. El estrés oxidativo, sin embargo, es un factor importante que puede alterar la producción de melanina de nuestro cabello y, por tanto, hacer que las canas aparezcan mucho antes de que lleguemos a envejecer. La alimentación, el ritmo de vida y, sobre todo, el ajetreo de la rutina, son algunos de los factores que contribuyen a este estrés oxidativo.
Aunque todas debemos trabajar en aceptarnos tal y como somos, es innegable que las canas son uno de los cambios más difíciles de digerir en nuestra imagen y, por eso, cuando no son tan evidentes nos empeñamos en disimularlas sea como sea. Cuanto más oscuro tenemos el cabello, más difícil nos resulta ocultarlas. Es cierto que las mujeres rubias juegan con la ventaja para poder disimular las canas con más facilidad. Angelina Jolie se encuentra en este grupo y tiene el truco definitivo para ocultar las canas a los 50: el tinte rubio ceniza.
El tinte rubio ceniza que Angelina Jolie utiliza para tapar las canas a los 50
A pesar de que su imagen no ha sufrido cambios notables en los últimos años, la melena de Angelina Jolie sí que ha experimentado un proceso de adaptación a su edad. El corte mariposa en su melena larga, que enmarca sus facciones a la perfección, la define, pero el tono de su cabello ha ido oscilando entre unas tonalidades y otras con el paso de los años. Cuando era joven, la actriz lucía una melena de color castaño oscuro, que evolucionó a claro yque, poco a poco, se fue decolorando hacia los matices caramelo hasta volverse rubia.
Un proceso significativo, pero poco llamativo, debido a la forma gradual con la que lo ha llevado a cabo. La experta en peluquería Olga G. San Bartolomé siempre nos explica que, conforme pasan los años, las melenas oscuras dejan de ser favorecedoras porque endurecen nuestro rostro, acentuando nuestras líneas de expresión y con ellas, los signos de la edad. La melena rubia por la que se ha ido decantando Angelina Jolie, por el contrario, es perfecta para dar un extra de brillo y luminosidad a nuestra imagen, difuminando dichas líneas de expresión y creando un rostro mucho más dulce y armónico, con una tez más luminosa y un efecto más energizante y favorecedor.
Angelina Jolie ha apostado ahora por matizar su melena rubia con un tono ceniza de lo más ideal, un color natural, que se funde a la perfección con su tono de pelo y que la ayuda a mantener a raya las canas sin la necesidad de mantenimiento y retoques constantes. El rubio ceniza es uno de los tonos más oscuros del tono rubio, caracterizado por tener reflejos oscuros que se acercan al gris y, por tanto, se funden con el color natural de nuestras canas. Se trata de un tono creado a partir de pigmentos fríos que, además, es especialmente favorecedor en las mujeres con una tez y unos ojos claritos como los de la actriz.
Dentro del rubio ceniza, podemos encontrarnos con dos matices, según explican los expertos de I.C.O.N:
- Rubio ceniza oscuro: Es un tono que combina una base rubia con matices fríos, evitando los tonos cobrizos y los dorados. Tiene reflejos grises y azulados y termina en un efecto natural y sofisticado, fácil de mantener y sin apenas necesidad de retoque, ya que se funde a la perfección con las canas.
- Rubio ceniza claro: Es un tono mucho más luminoso, con matices claritos y plateados que, a pesar de no llegar a ser un platino, aporta mucha luminosidad al rostro, resaltando las características faciales. Es un tono que requiere más mantenimiento, para evitar que se desgaste y aparezcan reflejos cálidos desagradables.
El rubio ceniza es, por tanto, la mejor opción por la que podemos decantarnos a la hora de tapar nuestras canas cuando no queremos estar demasiado pendientes de nuestra melena o no tenemos las posibilidades de darle un mantenimiento constante. Como cualquier tinte, sin embargo, necesita unos buenos cuidados y unos productos adecuados para evitar lucir descuidado y, sobre todo, para evitar que las canas adquieran un tono desagradable y muy poco estético.