¿Te imaginas de todo lo que serías capaz si confiaras en ti misma? Está demostrado que, para conseguir algo en la vida, no basta la aptitud. La actitud tiene un papel mucho más importante en el camino al éxito. Y es que tener seguridad en ti misma puede facilitarte mucho la vida.
El problema es que no siempre crecemos en entornos ideales para desarrollar la seguridad, y acabamos encontrándonos ante el muro de la inseguridad que nos paraliza y nos impide tener una vida plena. Por suerte, y tal como explica la psicóloga del deporte y la salud Patricia Ramírez Loeffer, la seguridad es músculo que se entrena.
Probablemente, la mejor forma de hacerlo sea en terapia, en compañía de un experto que sepa guiarte y te ayude a identificar los pilares de tu inseguridad. Pero también es cierto que hay pequeños cambios que puedes introducir en tu día a día que, poco a poco, te ayudarán a ejercitar este “músculo de la seguridad”, para que consigas ganar confianza en ti misma. ¿Quieres saber cuáles son?
Enfréntate a la duda
Como bien explica Ramírez Loeffer en uno de sus muchos vídeos para la plataforma Tu lado positivo, la inseguridad se sustenta en la duda en la mayoría de las ocasiones. Te propones un objetivo, pero en seguida aparece la duda para invadirlo todo, llegando a paralizarte.
Por ejemplo, podrías haberte propuesto cambiar de trabajo, pero en seguida empiezas a preguntarte si realmente merecerá la pena, si estás cualificada para otro puesto o si el cambio será verdaderamente positivo. Todas estas dudas pueden llegar a paralizarte, aunque por supuesto tienen su propio valor.
Tal y como explica la psicóloga, la duda tiene una razón de ser. Está ahí para ayudarte a ser reflexiva, a no caer en la impulsividad y a no tomar malas decisiones. Pero llega un punto en que toca enfrentarse a ella si quieres ganar seguridad en ti misma.
Tras dedicar el tiempo necesario a la reflexión, es hora de pasar a la acción. Para ello, debes aprender a dudar de la duda. Loeffer propone un sencillo ejercicio para conseguirlo. Basta con anteponer el verbo dudar a tus dudas.
Si una de esas dudas era “no sé si estoy cualificada para un nuevo puesto de trabajo”, cambia la frase por “dudo que no esté cualificada para un nuevo puesto de trabajo”. De esta forma, pondrás a la duda a tu favor.
Se trata de darle a la duda el mismo valor que a cualquier otro pensamiento inútil que pueda pasar por tu cabeza. Que tenga una finalidad en determinados momentos de tu vida, no significa que debas darle más importancia de la que tiene.
Deja de compararte, eres única
En el mundo en el que vivimos es difícil no caer en el vicio de compararse. Las redes sociales solo han conseguido potenciar este problema que ya era complicado años atrás. Pero es importante resistirse a este vicio y cambiar el chip si quieres ganar seguridad en ti misma.
La psicóloga aborda este asunto desde una perspectiva lógica. Lo cierto es que en lo que respecta a la especie humana, no hay dos individuos iguales genéticamente hablando. Lo que significa que todos somos especiales, diferentes y únicos. No tenemos comparación, en el sentido más literal de la palabra.
Si estuviéramos hablando de dos coches de la misma marca, el mismo modelo y hasta el mismo año de fabricación, podríamos hacer comparaciones sobre su estado o su eficiencia. Pero los humanos no podemos compararnos entre nosotros, porque somos únicos.
Quítate la presión de mirar hacia al lado buscando la comparación, y empieza a ver que todos somos maravillosos a nuestra manera. Cuando mires a los demás, hazlo con amor. Cuando te mires a ti misma, aún más.
Involúcrate en el cambio
Una de las grandes ventajas de ganar seguridad en ti misma es poder cumplir todos esos objetivos que hasta ahora se te escapan de las manos. Ponerte en forma, estudiar algo nuevo, cambiar de trabajo, romper una relación en la que te sientes atrapada o mejorar tus vínculos con los demás.
Pero resulta que la mejor forma de ganar confianza en ti misma para poder hacerlo, parte por dar el primer paso. Involucrarte en el cambio, empezar a caminar hacia tus objetivos, hará que te sientas satisfecha contigo misma. Y esta satisfacción reforzará tu autoestima y tu seguridad.
Para hacerlo, la psicóloga recomienda dividir los grandes objetivos en pequeñas metas. Siguiendo con el ejemplo del cambio de trabajo, un primer paso podría ser hacer el currículum. Luego, compartirlo o moverlo entre empresas de tu interés. Acudir a entrevistas. Apuntarte a cursos para mejorar tus habilidades.
Cada uno de estos pequeños pasos debe ser un objetivo en sí mismo. Y cuando vayas cumpliéndolos, tu seguridad en ti misma mejorará.
Cuídate, pero de verdad
Las personas que se quieren se cuidan. Esta es la base sobre la que se sustenta este consejo que nos ofrece la psicóloga para ganar confianza y seguridad. Porque si le damos la vuelta a la oración, sigue teniendo sentido. Las personas que se cuidan se quieren.
Así que, si quieres ganar seguridad en ti misma, debes empezar a cuidarte como cuidas a los demás. ¡O incluso más! Elige para ti una alimentación saludable, prepárate platos sanos y deliciosos que disfrutar en calma, haz ejercicio para que tu cuerpo se mantenga activo, regálate espacios de tranquilidad, duerme bien y elige ropa que te favorezca. Date todos los mimos y los cuidados necesarios para hacerte sentir querida, y tu seguridad en ti misma comenzará a aumentar día a día.
Identifica tus talentos, y trabájalos
Todos tenemos algo que nos gusta, que se nos da bien y nos hace felices. Es lo que conocemos como talentos. Y estamos acostumbrados a que estos talentos solo tienen valor si responden a la productividad, si pueden convertirse en dinero. Pero lo cierto es que la verdadera utilidad de los talentos es que nos hacen sentir felices, nos ayudan a sentirnos realizados.
Y si además puedes dedicarte a aquello que se te da bien, pues mejor que mejor. Pero no es el objetivo final de este apartado.
Lo que la psicóloga nos recomienda es que identifiquemos nuestros talentos y los desarrollemos para ganar confianza en nuestras habilidades. Hacer aquello que se te da bien, ya sea practicar algún deporte, hacer croché, sacar fotografías o dibujar, te ayudará a sentirte una persona útil y eficaz.
Ver como tus talentos se desarrollan te dará seguridad en ti misma, y te dará valor para lanzarte sobre objetivos más complicados.
Quítale importancia al fracaso
Para acabar, la psicóloga nos habla de la importancia de robarle valor al fracaso. En nuestra sociedad, en nuestra cultura, le damos tanto peso al fracaso que acaba por paralizarnos el miedo a enfrentarlo. Cuando lo cierto es que forma parte de la vida y, de hecho, puede llegar a ser muy enriquecedor.
De nada se aprende más que el del fracaso, y a esta vida hemos venido a aprender, a vivir. Repasa el historial de tus grandes fracasos para descubrir que, tras ellos, no se acabó el mundo. Ya has perdido antes y las consecuencias no han sido tan catastróficas como imaginabas. Has salido adelante, con nuevos aprendizajes y fortalezas. Así que no tienes nada que temer al enfrentarte a tus nuevos objetivos.
Tener esto en mente te dará la confianza necesaria para empezar a desarrollar tu seguridad en ti misma y para lanzarte a por aquello que deseas sin miedo.